Gorriarán mueve millones en ladrillo a través del grupo familiar

Gregorio Gorriarán, cerebro inmobiliario de Caixanova, participó en el holding de su hermano Antonio pese a negarlo en la Audiencia Nacional

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El viaje en el tiempo que supone sentar en el banquillo de la Audiencia Nacional a los exdirecivos de las cajas gallegas permite resituar a cada protagonista, después de los años transcurridos de una operación, la fusión de Caixanova y Caixa Galicia, firmada en 2010, que acabó en fiasco. Uno de los nombres propios que emerge con el paso del tiempo siempre que se abordan los negocios inmobiliarios de las cajas es Gregorio Gorriarán Laza, Goyo, ahora en apuros en la Audiencia Nacional por un crédito fallido en Rivas Vaciamadrid.

Visto para sentencia ha quedado un juicio en el que se han sentado en el banquillo de los acusados hasta cuatro protagonistas (Julio Fernández Gayoso, José Luis Pego, Domingo González Mera y el propio Gorriarán), los tres primeros, a juicio de los fiscales, poco menos que «arrastrados» por las decisiones que tomó en su día el máximo responsable inmobiliario de Caixanova, que también lo fue, de modo efímero, de la caja fusionada.

Supuesta separación de negocios

Gorriarán defendió en la vista oral la operación de Rivas, realizada en 2007, y que provocó un quebranto final a Caixanova de más de 40 millones de euros. En ese proyecto participaba, entre otros, Gorrigebe, sociedad propiedad del hermano de Gorriarán, Antonio, conocido exfutbolista. El propio Gregorio negó en el juicio que estuviera al tanto de los negocios de su hermano, pues éste «no me comentaba nada ni de esto ni de las 24 promociones inmobiliarias que estaba desarrollando en otras zonas», como Cantabria, Asturias y el País Vasco. 

Cuando se concede el crédito promotor finalmente fallido, Gorriarán era administrador de al menos una sociedad familiar

Sin embargo, los vínculos en el grupo familiar son un evidencia. Entre la maraña de sociedades que componen los negocios de Antonio, todos relacionados con el ladrillo, sobresalen algunas firmas de Antonio en las que Gregorio ha tenido activa presencia. Por ejemplo, fue administrador solidario junto a su hermano de Delta Consultores Inmobiliarios, domiciliada en Muskiz, Vizcaya.

Socios durante la operación de Rivas

De acuerdo con las anotaciones en el Registro Mercantil, Goyo Gorriarán fue durante más de cinco años administrador de Delta, cargo del que dimitió en 2009, al hacerse su hermano Antonio con la gestión única. Por tanto, cuando se firma la operación de Rivas y se concede el crédito promotor finalmente fallido, de acuerdo con los datos registrales, Gregorio era administrador mancomunado en al menos una sociedad familiar.

Y no se trata de una empresa cualquiera. De Delta Consultores Inmobiliarios, que opera con un holding, cuelga toda una serie de sociedades. Delta, con más de un millón de euros de activo, la mitad inversiones financieras, declara varias participaciones. Por ejemplo, controla el 100% de Gesduco SL, y un 99,6% de Kurtxes Berango. Y entre sus inversiones financieras a largo plazo, según sus propias cuentas, figura una participación en Gruinber SL (12,18%) y el 16,5% de Bilbao Desarrollos Urbanos SL.

No todo ha sido un camino de rosas para los Gorriarán. Delta tuvo que provisionar en 2012 más de 300.000 euros por el deterioro de los préstamos realizados a Bilbao Desarrollos Urbanos, al declararse en concurso voluntario de acreedores, y finalmente en liquidación.

El registro de la inhabilitación

Otra sociedad que vincula a los hermanos Gorriarán es Gestión Patrimonial Muskiz, que tiene un patrimonio superior a los 1,5 millones de euros. Gestión Patrimonial Muskiz tuvo que hacer pública a efectos registrales una de las recientes inhabilitaciones a las que tuvo que hacer frente Goyo Gorriarán, que también fue uno de los condenados por el cobro indebido de indemnizaciones millonarias al salir de Novagalicia.

La sociedad anotó en el Registro Mercantil de Vizcaya a principios del año pasado (mediados de marzo) el siguiente apunte: «Gregorio Gorriarán Laza ha sido condenado a la pena de inhabilitación especial para el empleo directivo y para el derecho de sufragio pasivo desde el 13 de junio de 2017 hasta el 12 de junio de 2019». Otra evidencia más, la de Gestión Patrimonial Muskiz, de lo indisolubles que resultan los negocios de ambos hermanos.

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