El dueño de Cosmos concentra en Vigo su imperio europeo del cemento
El holding gallego de Votorantim continúa engordando mediante la absorción de filiales en casi todas las empresas del grupo
El desembarco del gigante brasileño Votorantim en el histórico holding gallego Corporación Noroeste y, en consecuencia, en su filial más conocida, Cementos Cosmos, vino con una doble hoja de ruta. Por un lado, devolver la rentabilidad a la compañía que pasaba todas las penas derivadas del crack del ladrillo; y, por otro, controlar los activos que obtuvo de la portuguesa Cimpor, el anterior propietario, en un holding radicado en Vigo, en concreto, en la calle Brasil, número 56.
Este holding se llama Votorantim Cimentos EAA Inversiones SL y a cierre de 2013 contaba ya con unos activos valorados en 1.111 millones de euros y con más de 40 filiales, algunas de ellas dedicadas a la tenencia de valores en Macao y Hong Kong, lo que bien le puede reportar interesantes beneficios fiscales.
En todas las sociedades
Ese proceso de concentración societaria continúa y este mismo mes, el holding de Votorantim ha absorbido Votorantim Cements International, una sociedad que tuvo sede en Dinamarca –en Copenhague– y llegó a contar con un capital social superior a los 171,5 millones de euros. Tenía como único objeto controlar participaciones en las empresas del grupo, una función que ahora desempeña el nuevo holding.
Esta absorción es una más de una cadena que comenzó en 2013 y que afecta a todas las empresas que están bajo el paraguas de Votorantim en España. El holding absorbió anteriormente a Votorantim Europe SL; Cementos Cosmos, por su parte, integró a Cementos Cosmos Sur, las dos cementeras de la empresa en Andalucía; y a Materiales del Atlántico SL, una sociedad complementaria a las cementeras de Corporación Noroeste que llegó a contar con un capital social superior a los 3,5 millones.
Cosmos gana dinero
En medio de este proceso, Cementos Cosmos ha vuelto a la buena senda, aunque a Galicia le servirá de poco debido a la inactividad en la planta de Oural (Sarria). El grupo de cementeras ganó en el curso pasado 8,9 millones y, prácticamente, duplicó su cifra de negocio hasta alcanzar los 106,9 millones a fuerza de vender cemento, clinker y otros productos derivados. La producción de cemento se elevó en España en 2014 un 5,5%, algo que no pasaba desde que estalló la crisis.
