Yolanda Díaz rompe su silencio tras la polémica por la reforma laboral

La ministra de Trabajo trata de calmar las aguas tras la polémica por la anulación de la reforma laboral pactada con Bildu: “La derogación sigue su curso"

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El pasado miércoles, los grupos de PSOE y Unidas Podemos pactaron con Bildu la derogación urgente e íntegra de la reforma laboral de 2012 a cambio de su abstención en el Congreso ante la prórroga del estado de alarma. El pacto levantó una agria polémica, ya que tanto la patronal como los sindicatos afearon al Gobierno que firmase con un partido, en plena pandemia, un tema que debe debatirse en la mesa de diálogo social. El revuelo y la presión de la ministra de Economía, Nadia Calviño, obligaron al PSOE a mandar una rectificación pocas horas después de conocerse el acuerdo, en la que matizaba que la reforma se llevará a cabo, pero no de forma íntegra ni urgente. No obstante, el vicepresidente y líder de Podemos, Pablo Iglesias, indicó la pasada semana que lo firmado, firmado estaba y, por lo tanto, era obligado cumplirlo. Así comenzó una polémica en la que, una de las principales afectadas, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, optó por guardar silencio. Hasta este lunes.

En el marco de una intervención en el Senado, la titular de Trabajo ha asegurado que la derogación de la reforma laboral del PP  seguirá «su curso y su camino» en el marco del Diálogo Social, toda vez que su primera fase ya había comenzado antes de la pandemia del coronavirus. De esta forma, la dirigente gallega trata de tender puentes tanto con los sindicatos como como la patronal, que la pasada semana anunciaban que paralizaba el diálogo con el Gobierno a raíz del acuerdo con Bildu.

Díaz apela a patronal y sindicatos

Durante su comparecencia en la Comisión de Trabajo del Senado para explicar las medidas laborales aprobadas por el Gobierno para hacer frente a las consecuencias del coronavirus, Díaz ha afirmado que su ministerio seguirá trabajando para derogar la reforma «impuesta» por el PP y que «dinamitó el Diálogo Social» al ser aprobada sin este consenso. «Tengan claro que la derogación de la reforma laboral va a seguir su curso y su camino, con diálogo social», ha dicho tras incidir en que quiere «transmitir tranquilidad en ese aspecto» y apuntar que la actual precariedad del empleo es reflejo de esta reforma de 2012.

Aunque Díaz no se ha referido ni a las palabras de Iglesias ni a las de Calviño, ha indicado que, sin lugar a dudas, la reforma laboral se derogará «cuanto antes y en cuanto sea posible». Eso sí, la ministra se ha cuidado en medir sus palabras y ha recordado que «estamos en una pandemia«. 

Y es que, en toda la polémica suscitada por el acuerdo con Bildu sobre la derogación de la reforma laboral, la patronal incide especialmente en que, en estos momentos, con medio millón de empresas acogidas a ERTEs y con una crisis económica en camino, no se puede hablar de una supresión urgente (la misma tesis que enarbola la socialista Calviño). 

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