«Vote a esta puta y haré del Congreso un burdel respetable»
La prostituta Ángela Villón Bustamante revoluciona la política peruana con su candidatura a legisladora por el Frente Amplio. Mañana el país andino elige presidente, donde Keiko Fujimori, la hija del corrupto expresidente, puede ser la ganadora
El domingo, además de presidente, Perú puede elegir a una prostituta como diputada en su congreso. Aunque sus posibilidades reales son escasas, la aparición de la trabajadora sexual Ángela Villón Bustamante en la escena política peruana es un fenómeno en el país andino y en las redes del mundo.
Villón figura como candidata en el 19 lugar del Frente Amplio, el partido de izquierdas que se encuentra tercero en las encuestas para las elecciones presidenciales que mañana celebra Perú. En primer lugar de las preferencias está Keiko Fujimori, la hija del expresidente peruano preso por corrupto, y en segundo sitio el economista Pedro Pablo Kuczinsky.
Pero la irrupción de Villón ha llamado la atención del mundo por su particular campaña política. Para algunos, es un postureo de marketing. Para otros, una reivindicación de los sectores desprotegidos.
Mensajes picantes
Basta entrar en su cuenta de Twitter y ver la foto que encabeza la página: Villón exhibe un cartel que suscribe un viejo chiste «Las putas insistimos: los congresistas no son nuestros hijos». En un video de la revista Somos se presenta como «una puta decente que hará del Congreso un sitio respetable», y twittea fotos desnuda con picantes mensajes políticos: «se escandalizan por un cuerpo desnudo, se escandalizan porque soy prostituta, puta, ramera, pero calladitos están ante los curas pedófilos, ante la violencia! Que pena me dan!»
Señor, no soy digno de que entres a mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme. pic.twitter.com/02f59n0GLy
— Angela Villón (@veryangee) 6 de abril de 2016
Villón, de 50 años, comenzó en la prostitución a los 16 años. Trabaja en El Botecito, uno de los burdeles más antiguos de Lima. Se presenta como «puta y a mucha honra». «Para nosotras un burdel es nuestro centro de trabajo, donde dejamos el alma para sacar adelante a nuestras familias. Es un lugar donde hay seguridad, normas de convivencia, principios», dijo a Somos, y se presenta como activista de los derechos humanos y representante de las minorías.
Las opciones de los peruanos
Frente Amplio, su partido, lleva a Verónika Mendoza como candidata presidencial, aunque las encuestas le dan entre un 13 y un 15% de intención de voto. Pero Keiko Fujimori, con un 31 a un 34%, lidera los sondeos, pese a la pésima imagen que ha tenido su padre.
Alberto Fujimori dio un autogolpe de Estado en 1992 y luego renunció, o más bien, se fugó a Japón en noviembre de 2000, acosado por las denuncias de corrupción y violaciones a los derechos humanos. Ahora cumple una pena de 25 años de prisión por estos delitos en su país.
El surgimiento de Villón Bustamante no es casual. Pasa en un país donde la degradación de la clase política se combina con la negativa de las élites a reconocer la existencia de determinadas fuerzas emergentes. Es una muestra de cómo la crítica de las clases populares a sus dirigentes toma cada vez más fuerza.
