Salvemos Cabana carga contra la «política de masificación» en el Dolmen de Dombate

Critica la gestión realizada por el PP de Cabana y considera "cabal y proporcionada" la actuación de la Deputación al no renovar el convenio para la gestión del yacimiento

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La plataforma Salvemos Cabana ha criticado al alcalde de Cabana, José Muiño (PP), por la política de conservación del Dolmen de Dombate ya que, a juicio del colectivo, » defiende la afluencia masiva de visitantes mientras que en cualquiera de los principales sitios arqueológicos europeos se actúa desde una estrategia bien distinta de conservación preventiva, identificando y controlando los factores de deterioro de los bienes culturales a fin de minimizar cualquier posible efecto negativo».

Por este motivo, considera la no renovación del convenio con el consistorio una actuación responsable por parte de la Deputación de A Coruña, «tiene el deber de conservar el patrimonio cultural, que es de todos y todas, utilizándolo de manera racional y adoptando todas las medidas preventivas que sean necesarias». Ha sido una decisión «proporcionada y cabal, con el fin de conservar un bien público, y hacerlo del mejor modo posible para garantizar el disfrute del Dolmen de Dombate y sus valores a las futuras generaciones», insiste la plataforma.

Alerta de una estrategia de privatización

Salvemos Cabana entiende que el alcalde «dejó claro desde el primer momento su intención de dirigir a su antojo el yacimiento, cobrar entrada y gestionar directamente la contratación del personal (incluído el de limpieza), lo que obviamente le fue negado por Diputación coruñesa como entidad propietaria de la instalación, y que muchos vecinos y vecinas de Cabana aplaudieron ante el riesgo de proliferación del enchufismo en el parque arqueológico o la cesión directa a una empresa privada y la perdida del carácter público de la instalación».

La plataforma también fue especialmente combativa con la actividad de Cementos Cosmos en la cantera limítrofe al yacimiento de Cova de Eirós. Defiende que «el arte prehistórico es, por su propia naturaleza, muy vulnerable, lo que hace que su conservación sea compleja, implicando de manera permanente el control de una serie de variables -humedad o temperatura entre otras- que deben mantenerse constantes tal como señalan los expertos».

Según transmitió en un comunicado, el Dolmen de Dombate tiene una singular importancia por «tratarse de uno de los pocos yacimientos que combina petroglifos con restos de pinturas rupestres de época neolítica que puede darnos pistas sobre el simbolismo de esta época prehistórica».

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