Lo que ya no tocarán las manos de Sánchez

El Gobierno de Pedro Sánchez dejará decenas de propuestas de ley y un montón de promesas electorales en el tintero: poco puede hacer en tres semanas

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Tres semanas. Este es el tiempo que le queda a Pedro Sánchez antes de disolver las Cortes. Pese a que aseguró que trabajará “hasta el último minuto”, decenas de propuestas de ley y un montón de promesas electorales se quedarán en el tintero.

Sánchez prometió desmontar la reforma laboral del gobierno popular. Sin embargo, en sus ocho meses como presidente del gobierno nunca entró a matarla. Este viernes, el secretario general de la UGT, José María Álvarez, le animó a acabar como mínimo los aspectos “más lesivos” para los trabajadores, aunque difícilmente le quedará tiempo para ello.

En materia laboral, tampoco tirará adelante la implantación del registro horario en las empresas, una medida solicitada por los sindicatos pero criticada por la CEOE; ni la recuperación del subsidio para parados mayores de 52 años.

Y en materia fiscal, entre las asignaturas que quedarán pendientes está el proyecto de ley de impuesto sobre transacciones financieros y el del impuesto sobre determinados servicios digitales (conocido como tasa Google).

La ley de Cambio Climático impulsada por la ministra Teresa Ribera tampoco se aprobará, al menos en esta legislatura. Propone un polémico calendario para acabar con los vehículos con motor de combustión: no se podrán vender a partir de 2040, ni circular desde 2050.

También está en peligro el millonario plan de inversión en carreteras diseñado por el ministerio de José Luis Ábalos.

Aparcada la derogación de la ‘Ley Mordaza’

El gobierno de Sánchez tampoco tendrá tiempo para derogar la ley de Seguridad Ciudadana, más conocida como ‘Ley Mordaza’, implantada por el gobierno de Mariano Rajoy cuando gozaba de mayoría absoluta. Todos los grupos parlamentarios, con la única excepción del PP, están a favor de eliminarla. La ponencia de reforma, impulsada por el PNV, se inició el pasado otoño con más de 200 enmiendas.

Tampoco queda tiempo para derogar la prisión permanente revisable, implantada por Rajoy cuando gobernaba en mayoría absoluta. Toda la oposición la recurrió en su momento ante el Tribunal Constitucional.

El gobierno del PSOE también planeaba una reforma puntual de la Constitución para limitar el aforamiento de miembros del ejecutivo, diputados y senadores. El proyecto entró en el Congreso este enero y ahora se encontraba en fase de presentación de enmiendas.

Tampoco se aprobará el voto rogado que debía facilitar la participación de los españoles residentes en el extranjero en los procesos electorales.

Y tampoco tirarán adelante, con el fin de la legislatura, algunas comisiones de investigación. Una era sobre la presunta financiación irregular del PP.

Diversos dirigentes sociales y políticos han lanzado ruegos a Sánchez para que apure las tres próximas semanas para tirar adelante determinadas propuestas. Incluso el primer teniente de alcalde de Barcelona, Gerardo Pisarello, le animó a regular el precio de los alquileres de viviendas.

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