La reina de Inglaterra se enfrenta a una huelga en el palacio
Los 200 empleados del castillo de Windsor reivindican un aumento salarial
La fama de tacaña de Isabel II de Inglaterra le ha pasado factura en el castillo de Windsor, una de las residencias preferidas de la reina. Los 200 trabajadores del palacio habitado más antiguo de Europa tienen hasta el próximo 14 de abril para decidir si van a la huelga para reivindicar un aumento salarial. La votación ya está en marcha.
La plantilla real percibe unos 18.700 euros (14.400 libras) brutos anuales. El salario base está por encima del mínimo interprofesional, pero no supera lo que en las islas es conocido como el living wage, la retribución que permite vivir sin dificultades. Su aplicación no es obligatoria, por lo que la monarca no estaría incurriendo en ninguna ilegalidad.
Cierre antes de las elecciones inglesas
Si la votación sale adelante, el castillo de Windsor estaría inactivo en unas fechas simbólicas en la región: antes de las elecciones generales, convocadas para el 7 de mayo. Sería la primera ocasión en toda la historia de la monarquía británica que tenga lugar una huelga que obligue a cerrar las puertas de un palacio.
La reina ha manifestado en múltiples ocasiones ha manifestado su preferencia por el palacio medieval situado en el condado de Berkshire frente a la oficina, tal y como llama a su residencia oficial en Londres, Buckingham.
Sindicato impulsor de la medida
El sindicato que ha convocado la huelga, Public and Commercial Services Union, representa a 120 empleados de los 200 que trabajan en el castillo. Además de atender a la familia real, la plantilla se encarga de realizar las visitas guiadas en la residencia.
