Gonzalo y Abel Caballero entierran el hacha de guerra
Gonzalo Caballero reconoce una década marcada por las discrepancias con su tío, el alcalde de Vigo Abel Caballero, que no trascendieron del ámbito político
Un desayuno informativo en Santiago de Compostela ha servido al líder del PSdeG, Gonzalo Caballero, y a su tío Abel Caballero, alcalde de Vigo, para enterrar sus diferencias políticas. De hecho, el regidor y presidente de la Federación Española de Municipios y Provincial (FEMP) ha puesto en valor la «posición política sólida» con la que llega su sobrino a la dirección política del PSdeG «avalado» por un «importante triunfo en las primarias».
En la que es su primera intervención en los desayunos del Fórum Europa, Gonzalo Caballero ha reconocido que durante los últimos diez años tuvo «discrepancias suficientes» con su tío pero que no fueron «más allá» del ámbito político. «Mi forma de hacer política fue la que creí que era mejor», ha reconocido para dejar claro que mantendrá «toda» su «coherencia» en esta nueva etapa en la que busca ser el secretario general de «todos» los socialistas gallegos.
Nueva fundación
Además, casi 100 días después del congreso en el que fue ratificado como líder de los socialistas gallegos, ha avanzado que pondrá en marcha una fundación con la que el PSdeG «pondrá las mejores ideas al servicio del país» para revertir la situación de una «Galicia que va a peor».
Precisamente, en este punto, el jefe de filas de los socialistas gallegos ha descrito al Gobierno de Feijóo como un Ejecutivo que carece de «rumbo» y de «estrategia política y económica». Frente a ello, ha situado entre sus prioridades que la recuperación económica llegue a la ciudadanía.
Pérdida de peso político
Tras constatar que Galicia «ha perdido peso político» en el mapa estatal, Gonzalo Caballero ha advertido de que no se pueden permitir que las carencias del Estado de las Autonomías» deriven «en una tendencia recentralizadora».
De este modo, ante la posible reforma de la Constitución y con la vista puesta en la negociación del nuevo modelo de financiación autonómica, el dirigente socialista ha asegurado que Galicia tiene que estar «en el centro del debate y de cualquier tipo de reforma que se plantee». «Galicia pierde y nos preocupa», ha señalado para avanzar que los socialista gallegos defenderán «con calidad» el autogobierno y «la especificidad de Galicia como nacionalidad histórica«. «Si se hace una reforma, Galicia tendrá que estar en el pelotón de salida con las competencias de autogobierno que le correspondan a la nacionalidad histórica», ha opinado.
