El PSdeG se empeña en suicidarse 

Pontevedra y Ourense interponen recursos sin recorrido contra las listas, mientras Abel Caballero utiliza a Vigo para sus guerras internas 

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Tras escuchar plácidamente los elogios que ahora le dedica el imputado Manuel Baltar, presidente de la Deputación de Ourense, Núñez Feijóo dijo que el PP es un partido «unido» y que no va a «perder tiempo» con las disputas internas de otros. Por si acaso, dedicó un segundo más a matizar que esos «otros», en referencia al PSdeG, están «desesperados» por evitar fugas en su partido.

El discurso de los populares se ha centrado hasta ahora en combatir a En Marea, sin cargar demasiado contra los socialistas. Creen que no hace falta, el PSdeG se destruye solo. La imagen de unidad que intentó instaurar el candidato Xoaquín Fernández Leiceaga, anunciando que negociará con las mareas un gobierno de cambio y fotografiándose con los dos ex presidentes de la Xunta Emilio Pérez Touriño y Fernando González Laxe, ha saltado por los aires nada más registrar las listas.

A un mes de las elecciones, el ruido es ensordecedor. El PSOE gallego se tira los platos a la cabeza y ni una palabra llega de su programa político.

Guerra en Vigo

El enfado se sostiene en el tiempo. Abel Caballero, alcalde de Vigo, volvió a decir este martes que está «decepcionado» con el aparato del PSOE. «Llevo toda la vida aquí, que yo recuerde nunca se cambió una lista para las autonómicas en contra de las agrupaciones», insistió el alcalde de Vigo. «Desde la FEMP (órgano que preside) uno de mis lemas es pedir respeto para los alcaldes, y pido respeto para mí, porque yo gano elecciones. Conseguimos un gran apoyo social con mucho esfuerzo, y no le voy a fallar a mi ciudad», reiteró.

En opinión del regidor, las listas se «han cambiado en los despachos» y «contra los que ganaron las elecciones», sin escuchar a los alcaldes y a los militantes que habían propuesto una candidatura «pactada, dialogada y consensuada».

En esa lista, que encabeza Abel Losada, Ferraz introdujo en el número dos a Patricia Vilán y en el cinco a Gonzalo Caballero, sobrino y rival del alcalde vigués. Desde entonces, el PSdeG intercambia en público los reproches habituales que marcan su dinámica interna.

Guerra en Ourense

Los cambios en las listas también afectaron a Ourense, donde María Quintas fue reemplazada en el número tres por Carmen Rodríguez Dacosta, afín a Leiceaga. Quintas también habló este martes para manifestar lo «defraudado» y «estafado» que se siente el PSOE ourensano.

«Es una decisión arbitraria, que no está justificada, no responde a causas objetivas y no representa el sentir de la mayoría de los militantes», ha sentenciado, no sin echar en falta una «explicación» por parte de la gestora que dirige el PSdeG o de los órganos federales. Dicho esto, la diputada ha advertido de que «las decisiones siempre tienen consecuencias», en referencia a una posible caída de votos.

Recursos para hacer ruído

Desde ambas agrupaciones han impulsado recursos contra las listas que, según informan fuentes socialistas, no tienen recorrido alguno.

Estas fuentes aseguran que no está contemplada la posibilidad de recurrir las candidaturas y que en ningún caso las listas pueden ser cambiadas tras la decisión de Ferraz.

Engloban la petición de que se declaren nulas las listas en la ofensiva de los críticos para representar su enfado y que tuvo otro de sus manifestaciones en la renuncia de cinco miembros de la lista por Pontevedra afines a Caballero, que forzó la recomposición de la candidatura.

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