Cancela reafirma su divorcio con Ferraz antes de la reunión del Comité Federal

La presidenta de la gestora del PSdeG cree que "es un error" que su partido apueste por la abstención en la investidura de Rajoy y alerta del "riesgo de escisión"

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Pilar Cancela, la presidenta de la gestora del PSdeG no da su brazo a torcer. No ve «ninguna circunstancia» que le haga cambiar su ‘no’ a Rajoy, y así lo ha querido destacar la víspera del Comité Federal de su partido. Pero también ha aprovechado para mandar un mensaje de aviso a la dirección, señalando que su abstención en la investidura del líder del PP sería «un error» que entrañaría «riesgo de escisión» para la formación.

La líder socialista ve en la concentración de este sábado ante la sede de Ferraz «una de las primeras manifestaciones» de ese eventual «divorcio» entre la dirección del partido y el planteamiento de militantes que abogan por el ‘no’. En este sentido, lamenta que el PSOE opte por no escuchar a sus afiliados, lo que, en su opinión, sólo provocará que el malestar vaya en aumento.

Pérdida de confianza

Así, se refiere a la recogida de firmas para pedir un congreso y primarias, y destaca que «es un clamor» y que «no se puede dejar de escuchar a gente que está opinando», algo que «se refleja en asambleas». Posicionarse por la abstención, por tanto, a juicio de Cancela, es «ir contracorriente» de una «realidad».

Ella ve la situación es «complicada» e insiste en que el «mensaje» de que el PSOE posibilitará la investidura del líder del PP no es el que deben trasladar los socialistas. «Sería un retroceso y perderíamos la credibilidad», subraya.

Competencias

Por otra parte, cuestionada por la retirada de competencias para convocar un congreso, Pilar Cancela ha expresado «ciertas dudas» sobre que una gestora federal pueda adoptar esta medida respecto de otra gestora que fue nombrada en su día por una ejecutiva.

Apunta que su intención era «acabar con la interinidad» en el PSdeG pero asume que «se entendió que no procedía» ahora y «se aplazó» la decisión. No obstante, prefiere «no entrar en esto» y centrarse en «otras competencias» relevantes de la gestora, como la coordinación del grupo parlamentario y la gestión «política y administrativa» de la formación.

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