Caballero, sobre aplazar elecciones por el Covid-19: “Se votó el 11M»

Gonzalo Caballero, el líder del PSdeG, solicita al presidente Feijóo que aclare su postura sobre una posible suspensión de los comicios del 5A por el corona

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El coronavirus ha impactado de lleno en la precampaña de las elecciones gallegas ya que la Xunta de Galicia ha decidido restringir actos de más de 1.000 personas, lo que afecta a los habituales mítines políticos. No obstante, en estos momentos, las formaciones miran hacia la Junta Electoral Central después de el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, deslizase la posibilidad de un aplazamiento de la fecha electoral. El secretario xeral de los socialistas gallegos, Gonzalo Caballero, ha recordado este miércoles que en España se han celebrado comicios en «situaciones muy complejas», como las generales del 2004, tres días después de los atentados del 11M en Madrid.

“Tras unas elecciones terribles se mantuvieron las elecciones por salud democrática”, dijo Caballero, que manifestó también que en el País Vasco “se celebraron elecciones durante muchos años con la amenaza de una banda terrorista”. 

“No lanzar rumores”

En todo caso, ha matizado que, en la medida en que hay un proceso abierto y la actual legislación fija la cita electoral, debe ser el presidente de la Xunta el que traslade «la perspectiva» que se plantea, «en vez de estar lanzando rumores y generando determinadas declaraciones inadecuadas».

A ese respecto, ha subrayado que Núñez Feijóo y su gobierno deben mantener informados al resto de partidos políticos sobre la situación del coronavirus y las decisiones que se tomen, para «garantizar una posición de país«, y ha afeado al presidente gallego que hubiese anunciado en las últimas horas “medidas que no fueron previamente trasladadas ni dialogadas”.

Mantener mecanismos de “salud democrática”

Gonzalo Caballero, que ha pedido «interlocución directa» con Feijóo, ha puntualizado que, en estos momentos, la salud de los ciudadanos es una cuestión «prioritaria», pero ha apostado por mantener, «en la medida de lo posible», la actividad económica, logística y los «mecanismos de salud democrática» que implican respetar las normas. «Algo distinto obligaría a que el presidente hable con el resto de partidos», ha reiterado.

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