Curtidos Colomer Munmany, una sombra de lo que fue

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El grupo curtidor Colomer Munmany, de Vic, antaño líder mundial del ramo, ha quedado reducido a la mínima expresión tras años de crisis, ajustes laborales y clausuras fabriles que encerraban operaciones especulativas con las plantas industriales.

El capital social de la compañía está controlado por tres veteranos empresarios: Pedro Olabarría Delclaux, Jaume Rosell Sanuy y Carles Sumarroca Coixet. Este último es uno de los fundadores de Convergència. La Audiencia Nacional lo ha imputado por sus relaciones con Jordi Pujol Ferrusola, tras amasar una regular fortuna gracias a las incontables concesiones de obra pública de la Generalitat.

El terceto de marras entró en Colomer hace justo veinte años. Se sintió atraído no tanto por las expectativas del negocio peletero, que ya andaba renqueante, sino por los valiosos activos industriales que la compañía poseía en pleno casco urbano de Vic. Tras la toma de posesión de los nuevos dueños, se cerraron las fábricas vicenses, se instrumentó la consabida recalificación urbanística y se vendieron los predios.

La actual empresa guarda pocas semejanzas con la que se encontró el trío mencionado. Tenía un millar largo de empleados en la comarca de Osona y en varias plantas de Extremo Oriente. Hoy cuenta con la homeopática cifra de 40. Los 120 millones anuales de giro han menguado en 2013 a 41 millones, con un excedente de apenas un millón de euros.

La otrora pujante red de filiales exteriores se limita a Corea, China y Japón, tras una sucesión ininterrumpida de cierres, los últimos de ellos en Reino Unido y Grecia.

El consejo de administración de Colomer está presidido por Emilio Gutiérrez Fernández de Liencres. Éste es un ejecutivo de largo recorrido. Con anterioridad, fue presidente de Banco Mercantil de Tarragona antes de su absorción por el Central Hispano; directivo de la desaparecida inmobiliaria Filo; consejero de las loterías catalanas Luditec; y vocal de la papelera Torras Hostench, germen de Grupo Torras. De consejero delegado de Colomer ejerce Jaime Alvira Calvo, también procedente de Torras Hostench, donde desempeñó la dirección general.

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