Los planes de pensiones son clave en el ahorro en la renta

A pesar que las rebajas fiscales de los planes de pensiones son su principal ventaja, tres de cada diez españoles con un plan contratado no sabe que estos productos ofrecen una rebaja en el IRPF, y el 77 % desconoce cuánto ha ahorrado en impuestos el último año por las aportaciones realizadas.

Así lo precisa el Informe Naranja: Tendencias clave de los españoles ante la jubilación de ING Direct. Y dado que hace tres semanas comenzó la campaña de la declaración de la renta de 2016, es importante conocer cómo funciona su ventaja fiscal, para saber cuánto se puede ahorrar según las aportaciones realizadas, y cómo sacar partido para la presentación del año que viene.

Un plan de pensiones permite el ahorro de 8.000 euros

Los planes de pensiones permiten rebajar de la base imponible general hasta 8.000 euros, o al 30% de los rendimientos del trabajo y actividades económicas.

Sin embargo hay que tener en cuenta que las cantidades que no tributen mientras se realizan las aportaciones tendrán que regularizarse más adelante, pero es probable que el IRPF que se pague durante la jubilación sea inferior al que se abona mientras se ahorra. Este es el ahorro real.

Esta reducción significa que el total sobre el que se calculará el IRPF será menor y, por ende, también los impuestos que se pagarán. Es decir, si la base imponible general en la declaración de la renta de 2016 es de 30.000 euros y durante el pasado año se aportaron 5.000 euros a un plan de pensiones, la base se reducirá hasta 25.000 euros. Como la reducción se realiza en la menor de las dos cantidades antes mencionadas y los 5.000 euros aportados no suponen el 30 % del salario bruto, se reducirá el total de lo aportado.

En el ejemplo anterior, las aportaciones al plan de pensiones suponen un ahorro de 1.500 euros en impuestos, según una proyección de la calculadora gratuita de fiscalidad de planes de pensiones de HelpMyCash.com. Esta herramienta permite calcular cuál será el ahorro fiscal cada año según las diferentes variables (salario, aportaciones realizadas o tramo de IRPF) que afectan a esta rebaja de impuestos y el ahorro total hasta el momento de la jubilación.

¿Cuál es la cantidad ideal a aportar?

Por ley, desde el 1 de enero de 2015 solo se puede aportar hasta un máximo de 8.000 euros anuales a los planes de pensiones. Aunque muchos crean que aportar el máximo permitido es la mejor manera de aprovechar las ventajas fiscales que ofrecen los planes, no siempre es así. Cabe calcular cuál será la cantidad máxima que se podrá deducir.

Como se citó previamente, el máximo de ahorro será hasta 8.000 euros o el 30 % de los rendimientos del trabajo. Así, si se cobraran 30.000 euros y se aportaran el máximo (8.000 euros) se estaría aprovechando al máximo la ventaja fiscal, ya que el 30 % de 30.000 euros son 9.000 euros, por lo que se podría rebajar el total de las aportaciones realizadas de la base imponible general.

En cambio, si el salario es de 22.000 euros y se aportaran 8.000 euros, no aplicarían la reducción sobre todo el dinero aportado: el 30 % de 22.000 euros son 6.600 euros, lo que significa que se estaría consignando 1.400 euros que no se podrían deducir.

Así, para poder sacarle el máximo provecho a la ventaja fiscal que ofrecen los planes de pensiones, hay que calcular si el 30 % de los ingresos brutos superan o no los 8.000 euros para poder aprovechar a un plan el máximo sobre el que aplicarán la rebaja fiscal.

No obstante, lo cierto es que las cantidades aportadas que no puedan ser deducidas en el ejercicio fiscal en cuestión porque superen los límites establecidos podrán ser desgravadas en los cinco ejercicios siguientes.