Los March se olvidan de la crisis y pagan un 10% más a su dirección

Banca March es el banco más solvente de España y de las 91 entidades europeas que en julio del año pasado se sometieron a los test de estrés realizados por el Comité Europeo de Supervisores Bancarios (CEBS). Según aquellas pruebas, terminará este año con un ratio de solvencia o Tier 1 del 19% en el peor de los escenarios posibles. De ahí que su consejo de administración haya decidido subirse la retribución un 10% diciendo adiós a la crisis del sector.

La cifra de solvencia del banco especializado en banca privada y de empresas está a años luz del 10% de Santander; el 9,3% de BBVA; el 7,2% de Sabadell; o el 7% de Popular. “Somos un banco familiar muy conservador y prudente y muy especializado», recuerdan desde la entidad.

Tanta solvencia ha llevado a Banca March a las primeras páginas de los diarios, como a mediados del siglo pasado lo hizo la vinculación del histórico Juan March con el régimen franquista, con un papel especialmente relevante durante la Segunda Guerra Mundial, en la que mantuvo intereses tanto con Alemania como con los aliados.

Hoy, una de las grandes señas de distincion de Banca March es la discreción. No cotiza, por lo que sus directivos y consejeros están lejos de los focos a pesar de constituir uno de los mayores núcleos de poder del país. Por ejemplo, con el 18,3% del capital de ACS –vendió un 5% en febrero–, el banco que preside Carlos March es el primer accionista de la constructora que preside Florentino Pérez, la mayor del país por capitalización bursátil.

Los dueños de la ACS de Florentino

Su brazo inversor es Corporación Financiera Alba. Además de su paquete en ACS, participa en el capital de Acerinox (24,2%), Indra (10,0%), Prosegur (10,0%), Ebro Foods (6,1%), Clínica Baviera (20,0%) y Antevenio (20,5%).

Además, su sociedad de capital riesgo participa en el capital de Mecalux, Pepe Jeans, Ros Roca, Panasa y Ocibar y ha llegado a un acuerdo para la compra del 19,6% de Grupo Flex. Todo un imperio al que se suman más de 100.000 metros cuadrados en inmuebles repartidos entre Madrid y Barcelona, que generan al grupo millonarios ingresos en concepto de alquiler.

Afloja el cinturón

Pero la envidiable salud financiera del grupo –que no obstante sufre como todo el sector la reducción de la actividad bancaria y el año pasado ganó el 11,7% menos– no ha evitado que, durante los dos años más duros de la crisis (2008 y 2009) su cúpula se haya apretado el cinturón.

Eso sucedía hasta el año pasado, en el que Banca March decidió que, al menos en lo que se refiere a la retribución de su consejo y en el caso de su cúpula directiva también al número de ejecutivos, lo peor ya ha pasado.

Tres millones para once ejecutivos

La alta dirección del grupo se embolsó el año pasado 2,95 millones de euros, el 11,2% más que el año anterior aunque todavía algo por debajo de los tres millones que cobraron en 2007, el año en el que comenzó la crisis. Además, la alta dirección se amplía desde 9 a 11 personas, la misma cifra que en 2008.

En 2010, el banco incluye en su alta dirección a los directivos responsables de las áreas de gestión e inversiones de inmuebles, y a una adjunta a banca comercial, María Luisa Lombardero, que el año anterior aparecía como directora general del área, cargo que ahora recae en José Luis Acea.

Mayor incremento que el Santander

Lo mismo ocurre con el consejo de administración, que en 2010 se embolsó 2,83 millones de euros, el 18,6% más que el año anterior, cuando el máximo órgano de administración rebajó de forma drástica sus ingresos fijos. La subida del último año casi supone volver a los niveles retributivos del 2007.

Las subidas en el grupo balear –que ha ganado un 71% más gracias a la venta del 5% de ACS en el primer trimestre– son incluso superiores a las del primer banco del país, el Santander, el que mejor paga a sus consejeros y directivos. Los primeros ganaron 39,7 millones en 2010, el 13,4% más que el año anterior. Y su alta dirección se embolsó 78,4 millones, un 5% más.