Los bancos lanzan ofertas confusas para vender tarjetas

La mayor parte de las promociones que realizan son algo tramposas, ya que o bien son temporales, o bien están condicionadas a cumplir una serie de requisitos

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

Pese a la fuerte apuesta de la banca por los medios de pago electrónicos, las tarjetas de débito y de crédito siguen siendo uno de los productos más comercializados. De hecho, la cantidad de tarjetas en oferta es tan grande que las entidades emisoras buscan nuevas maneras de captar a clientes, ya sea eliminando las comisiones u ofreciendo generosos descuentos y bonificaciones.

Sin embargo, muchas de estas ofertas son algo tramposas, ya que o bien son temporales, o están condicionadas a cumplir una serie de requisitos. Los reclamos publicitarios que utiliza la banca para vender sus tarjetas de débito y de crédito pueden dar lugar a confusión, por lo que antes de contratar uno de estos productos es recomendable leer bien las condiciones de la oferta.

Sin comisiones sólo durante el primer año

Muchas tarjetas, tanto de crédito como de débito, sólo son gratuitas el primer año. Pasado ese tiempo, la entidad emisora cobra anualmente una comisión de mantenimiento que puede llegar a superar los 30 euros.

En otros casos, la tarjeta se mantiene sin comisiones de emisión ni de renovación, pero sólo si se cumplen unos requisitos de vinculación concretos, como mantener una nómina domiciliada de unos ingresos mínimos. Si se dejan de cumplir estas condiciones, la entidad cobrará las cuotas anuales de manera automática.

Sin embargo, también es posible encontrar tarjetas de débito y de crédito que son gratuitas año tras año. Una de ellas es la Tarjeta bancopopular-e, una tarjeta de crédito sin cuotas de emisión ni de renovación que se puede contratar sin necesidad de cambiar de banco y que, además, regala 25 euros por la primera compra realizada.

Devolución de compras

La devolución de un porcentaje de las compras realizadas es una ventaja que incorporan muchas tarjetas de crédito y que permiten ahorrar un poco de dinero cada mes. No obstante, muchas entidades limitan la devolución a las compras aplazadas, para las que hay que pagar unos intereses que pueden superar el 20 % TAE.

Por ello, si no interesa fraccionar los pagos, siempre será recomendable contratar una tarjeta como la Nueva Visa Barclaycard, que devuelve el 1 % de todas las compras y permite reembolsar la totalidad del dinero usado hasta en 59 días al 0 % TAE.

Por otro lado, el reclamo que puede resultar más dañino para los bolsillos es el de la devolución del crédito usado en pequeñas cuotas. Aunque puede ser muy cómodo, si se paga una mensualidad muy reducida, se pueden tardar varios años en saldar la deuda contraída y, además, se pagará mucho dinero en intereses.

Por ejemplo, si se ha contraído una deuda de 1.000 euros con una tarjeta de crédito al 24 % TIN y se decide devolver el dinero pagando una cuota de 30 euros al mes, se demorará unos cuatro años en reembolsar el crédito, y se pagará más de 600 euros en intereses.

Avatar

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp