Europa estrecha el cerco sobre las ayudas públicas a los puertos

La Comisión Europea ha sacado del cajón el viejo proyecto de regular a nivel comunitario las ayudas de Estado a los puertos, asunto que está sobre la mesa desde el año 1997, cuando se publicó el Libro Verde sobre Puertos Marítimos e Infraestructuras Portuarias. De hecho, existe un reglamento de 2014 que establece una amplia exención a la hora de subvencionar a los puertos y aeropuertos para el desarrollo de infraestructuras y otras actividades para las que reciben ayudas.

Bruselas propone ahora ampliar esta regulación, para lo que ha abierto un periodo de consulta pública para ciudadanos, empresas y organizaciones que se prolongará hasta el 30 de mayo. Aunque la perspectiva es incluir modificaciones en base a las propuestas que se reciban, el borrador inicial define qué inversiones pueden recibir ayudas de Estado y por qué cuantía.

El dragado se queda fuera

Así, establece que deberían destinarse a infraestructuras y superestructuras portuarias (con excepción de las grúas u otras infraestructuras de tipo móvil) y a las infraestructuras de acceso, incluido el dragado. Excluye de este punto el dragado de mantenimiento, que quedaría en la lista de ayudas prohibidas y que es especialmente costoso para las autoridades portuarias.

Respecto a los porcentajes máximos de ayudas se fijan tres tipos:

– Hasta 20 millones de euros, las ayudas puede alcanzar hasta el 100% de la inversión 
– Entre 20 y 50 millones de euros, el 80% de la inversión
– Entre 50 y 100 millones de euros, el 50% de la inversión 

También regulan las concesiones a terceros de infraestructuras portuarias que hayan recibido ayudas para su construcción. En este caso, se establece un periodo máximo de concesión de 30 años.