Abanca y sindicatos llegan a un acuerdo sobre la jornada laboral y los sueldos

La dirección de Abanca y los sindicatos UGT, CCOO y Csica han alcanzado un acuerdo sobre la jornada laboral y los sueldos de los trabajadores. Lo han hecho tras una reunión que ha durado cuatro horas este viernes. Por lo menos así lo aseguran los representantes de la central nacionalista CIG, la única que no ha firmado.

La reunión se celebró este viernes tras acabar el martes sin acuerdo el anterior encuentro, en el que las discrepancias se situaron en los cambios que pretendía la empresa y que afectan tanto a la jornada laboral como a los sueldos de los futuros contratos. El objetivo de los sindicatos era eliminar aspectos sin aplicar del anterior expediente de regulación de empleo, todavía en vigor.

Horario ‘flexible’

Finalmente, según Villar, se ha acordado la propuesta inicial dela entidad de flexibilizar el horario de los trabajadores, de modo que todos ellos tengan una jornada que puede variar, hasta las 19:00 horas, en función de las necesidades de cada oficina. Según la CIG, eso sí, no se extenderá el horario hasta las 19:30 horas de la tarde como propuso la dirección de la entidad financiera en 188 oficinas.

Abanca se ha comprometido, según la versión sindical, a no aplicar la reducción de jornada que afectaba a unos 800 trabajadores, así como tampoco los despidos de 348 empleados que faltan por aplicar del último ERE de la entidad.

Sueldos con la media del sector

En cuanto a los sueldos, la entidad de Juan Carlos Escotet busca equipararlos con los del resto del sector bancario, al contar los empleados con condiciones diferenciadas resultado de su origen en la fusión de las dos cajas de ahorro, Caixa Galicia y Caixanova.

En esta cuestión, Miguel Villar ha indicado que «los complementos permitidos por funciones solo se podrán reducir un 15% para los salarios superiores a los 60.000 euros al año».

Sobre las razones por las que la CIG no lo ha suscrito, su representante ha considerado que, detrás de este documento, hay «una artimaña» de la empresa. «Se busca legalizar un horario ilegal», ha recalcado, tras considerar que supondrá «un horario flexible y sin control».