Vestas seguirá en Viveiro

La firma danesa de aerogeneradores garantiza la continuidad de su planta de Viveiro mientras busca una alternativa al cierre de las instalaciones de León

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Vestas mantendrá activo su centro de producción en la localidad lucense de Viveiro. Es más, el fabricante danés de aerogeneradores ha trasladado este lunes al Gobierno su compromiso de seguir invirtiendo en la planta gallega, así como la que tiene en la localidad ciudadrealeña de Daimiel, para convertirlas en referentes de producción para Europa.

Los trabajadores de la fábrica lucense habían mostrado su preocupación la semana pasada tras conocer la noticia del cierre de la planta de la multinacional en la comarca de Villadangos del Páramo (León), pero finalmente podrán respirar tranquilos después que el Ministerio para la Transición Ecológica desvelase cuáles son las intenciones de la compañía.

Negociaciones con Vestas

Lo hizo tras la reunión mantenida entre la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, y la dirección de Vestas, que tenía como tema central la apertura de una  línea de negociación permanente para trabajar en los próximos días en la búsqueda de alternativas industriales para la comarca de Villadangos, afectada por el cierre de la planta que posee allí la firma danesa.

El encuentro, al que también ha acudido el secretario general de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa, Raül Blanco, y el director general de Industria y Pequeña y Mediana Empresa, Galo Gutiérrez, forma parte del proceso de reuniones que el Ejecutivo mantiene con la empresa desde que se conoció su decisión de abandonar la provincia leonesa.

Cambio de rumbo

Desde la llegada al Gobierno de Pedro Sánchez, el departamento que dirige Teresa Ribera ha estado trabajando en el diseño del proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética y el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, que estarán listos antes de final de año y que apostarán decididamente por un incremento en la producción de energía a partir de fuentes renovables.

«Este cambio de rumbo, en cumplimiento con los acuerdos internacionales firmados por España en la lucha contra el cambio climático, contrasta con la política energética liderada por el anterior Gobierno, que no apostó por el desarrollo de energías renovables ni anticipó la necesaria transición hacia un nuevo modelo. Es en este anterior contexto en el que se enmarca la decisión del cierre de la planta de Vestas en León», indica el comunicado del ministerio.

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