Clamor contra el cierre de Alcoa: "A partir de ahora, caña"

Continúa el reguero de protestas contra el despido colectivo iniciado por Alcoa en su planta de aluminio de San Cibrao. Más de un millar de personas se han concentrado este jueves frente a la Subdelegación del Gobierno en Lugo para expresar su repulsa hacia el movimiento de la multinacional estadounidense, que ha iniciado el proceso de despido de 534 empleados de la factoría.

Durante la protesta se han tirado huevos y harina contra la fachada del edificio, se han encendido bengalas y se han portado pancartas con los mensajes ‘Sin industria no hay futuro’ y ‘Aluminio solución. Alcoa go home’.

La protesta ha contado con la presencia no solo de empleados de Alcoa, sino que también se han unido centenares de ciudadanos de la Mariña lucense, así como los propios miembros del comité de empresa, que, minutos antes de las 13.00 horas han hecho acto de presencia en la movilización después de haber pasado buena parte de la mañana reunidos con la dirección de Alcoa en España ante el inicio del despido colectivo.

«No se puede permitir la deslocalización»

En la concentración también han estado representados todos los grupos políticos, incluso en el Ayuntamiento de Lugo se ha parado el pleno ordinario del mes de junio, para sumarse a la manifestación. El propio presidente del comité de empresa, José Antonio Zan, ha lamentado que «hoy es un día muy triste para toda la industria española». «El Gobierno y la Xunta de Galicia tienen que poner los huevos encima de la mesa», ha clamado, porque «no se puede permitir que se destruyan las empresas del aluminio» y no se fabrique en España para después «importar más de un millón de toneladas del extranjero».

Zan ha remarcado la necesidad de que «hay que defender la industria nacional» y «no se puede permitir la deslocalización» en el «gran fraude que está haciendo Alcoa con todos los trabajadores». El representante de los trabajadores insiste en que Xunta y Gobierno tienen que «tomar medidas» y que a estas alturas «ya no valen las buenas intenciones» ni del «Gobierno ni la Xunta». «Queremos propuestas concretas», sentencia, y «por escrito». Por ello, pide a las administraciones «que no defiendan a la multinacional» y sí esté «con su industria».