Plantón de Alcoa al Gobierno en la reunión clave sobre su futuro
Alcoa no participó en la reunión telemática de urgencia convocada por el Ministerio de Industria para tratar de desbloquear la venta de San Cibrao
Plantón en toda regla. Alcoa, la multinacional americana dueña de la fábrica de aluminio de San Cibrao, no ha acudido a la reunión telemática convocada de urgencia en la mañana de este miércoles por el Ministerio de Industria de Reyes Maroto para tratar de desbloquear la situación que atravisa la factoría de A Mariña, en donde el grupo de Pittsburgh pretende acometer un ERE que podría dejar a 534 personas en la calle.
Industria convocó la reunión telemática de urgencia después de que empresa y sindicatos mantuviesen una maratoniana sesión de reuniones que llegó a las 30 horas de duración y que finalizó la mañana de este miércoles sin ser posible llegar a un acuerdo entre ambas partes y toda vez que ya ha expirado el plazo de negociación del despido colectivo en marcha.
Después de comprobar que las negociaciones estaban literalmente encalladas, Maroto convocó una cita urgente, «una reunión al más alto nivel», según calificaron los sindicatos. A esa reunión, además de la Xunta de Galicia y los sindicatos con representación en el comité de empresa también estaba convocada tanto Alcoa como Liberty House, el grupo británico del conglomerado GFG Alliance que ha mostrado su interés por la planta de A Mariña y que ha presentado tanto al Gobierno gallego como a los trabajadores un plan industrial que garantiza el mantenimiento del empleo y de los puestos de trabajo.
Apoyo unánime al comité de empresa
El plantón de Alcoa cuando las negociaciones se llevan a cabo in extremis parece haber dejado completamente sola a la multinacional. Tras la reunión celebrada –que se llevó a cabo aún sin la presencia del grupo americano– tanto el Ministerio de Industria, como la Xunta de Galicia y los sindicatos CCOO, UGT y CIG han querido manifestar de forma pública «su apoyo al comité de empresa y su compromiso de seguir trabajando desde la unidad para lograr que el proceso de compra-venta de la planta de Alcoa San Cibrao tenga las certezas necesarias para que dicha operación se efectiva».
«Todas las partes entienden que esta es la mejor manera de garantizar tanto el mantenimiento de la actividad industrial como de los puestos de trabajo en la comarca de A Mariña», indican.
Continúan las negociaciones
Si bien el plantón de Alcoa es especialmente significativo, por lo menos de forma oficial, las negociaciones continúan. Tanto comité de empresa como Alcoa se han citado de nuevo para esta jornada de jueves (a partir de las 10.00 de la mañana) para una nueva reunión. A pesar de que, oficialmente, el periodo de negociación ha expirado, las actas de consulta del ERE aún no se han firmado.
Alcoa no hace declaraciones al respecto. No obstante, según las centrales sindicales, el principal escollo en este momento radica en la insistencia de la multinacional en parar las cubas de electrolisis de la planta de aluminio, es decir, ponerla en hibernación, mientras negocia su posible venta (el grupo ofrece a los trabajadores ir al ERE o bien aplicar un ERTE de dos años). La parada de las cubas es una posibilidad que los trabajadores rechazan de plano. También la propia Liberty, que ya ha indicado a los sindicatos que su plan de futuro se vería trastocado con este hecho. Los representantes de los trabajadores –que al igual que la Xunta de Galicia y el Gobierno central, califican de «solvente» la oferta de Liberty– insisten en que el comprador británico les asegura que la compra podría cerrarse en menos de un mes si existe voluntad.
En medio de toda esta situación, la administración gallega ha dejado claro desde el pasado fin de semana que al existir una oferta industrial pública y contrastada, Alcoa podría incurrir el fraude ley si no desiste del ERE y se sienta a negociar.
