Los nuevos gestores de la Fábrica de Armas son especialistas en liquidar empresas y en compraventa de suelo

Blanco y en botella. Si algo tienen en común los socios del grupo que está detrás de Hércules de Armamento SL, la flamante adjudicataria del concurso para llevarse la Fábrica de Armas, son unas credenciales que no apuntan precisamente a una gestión estable de la planta. La compraventa de suelo en A Coruña y Oleiros es la principal especialidad de las promotoras inmobiliarias de Ramón Mejuto Lorenzo, rostro visible del proyecto. Y la liquidación de empresas y sus activos es uno de los ejes de actuación de Bussinessnear SL, firma consultora con domicilio social en el mismo despacho que Hércules de Armamento, en A Coruña, y gestionada por otro socio del proyecto, Juan José Gómez Rey.

Los antiguos trabajadores de la Fábrica de Armas tienen sus sospechas sobre un proceso de adjudicación opaco e intentan armar un puzzle de intereses que hasta ahora no ha pasado de un nombre, Hércules de Armamento SL, sin proyecto conocido para las instalaciones propiedad del Ministerio de Defensa. A pesar de ello, ha obtenido mayor puntuación que su rival, IFFE, en el proceso de subasta. En juego, una factoría que se levanta sobre 230.000 metros cuadrados a la entrada de A Coruña, con unas instalaciones en desuso desde el cierre de la planta.

Los vínculos

Además de administrador único de Hércules de Armamento SL, Ramón Mejuto Lorenzo gestiona junto a su mujer, María Esther García Arévalo, la sociedad Promociones Inmobiliarias Mejmar SL, constituida en 2002 y con base de operaciones en Dorneda (Oleiros). Mejuto Lorenzo también es socio de la firma Traballos de Construcción e Rehabilitación SL, creada en 2010 en Arteixo junto a otro socio, Javier Antelo Vázquez.

Promociones Inmobiliarias Mejmar SL es una sociedad especializada en la compraventa de suelo, actividad que combina con la promoción de viviendas. De acuerdo con los datos depositados en el Registro Mercantil par la propia firma, la sociedad de Ramón Mejuto no cuenta con trabajadores en plantilla y ha realizado diversas operaciones con solares en ubicaciones como las conocidas calles Emilia Pardo Bazán, Marconi, Avenida República Uruguay y en zonas residenciales como Dorneda. Los suelos se reparten entre A Coruña y Oleiros, según las mismas cuentas. La firma declaró unos activos de 1,6 millones de euros en el ejercicio de 2012.

Más socios

Hércules de Armamento SL está arropada por una consultora que se encuentra en el mismo domicilio social que la flamante adjudicataria de la Fábrica de Armas de A Coruña, en la calle Avenida San Roque de Afuera, número 9. Se trata de Businessnear SL, cuyo administrador es Juan José Gómez Rey, que incorpora como cliente en sus promociones a Hércules de Armamento. Businessnear es una consultora creada en mayo de 2013, apenas unos meses antes de la constitución de Hércules de Armamento.

La firma de Juan José Gómez Rey lleva a gala actividad internacional en países como Colombia, Nicaragua y Panamá. También, según destaca el propio Gómez Rey en sus perfiles profesionales en redes sociales, centra su actividad en el «asesoramiento para gestión de activos industriales en venta o liquidación». Otro de los ámbitos en los que opera es el «asesoramiento para la gestión de esos activos ante entidades financieras». Recientemente ha creado una plataforma digital para fomentar negocios.

Un uso siempre industrial

Ante la inquietud que se ha levantado por la adjudicación, desde el Ayuntamiento de A Coruña se muestran tajantes. El uso de los terrenos es industrial y así se mantendrá mientras Carlos Negreira sea alcalde, mantienen fuentes del equipo de Gobierno. Eso es algo irrenunciable, matizan. A la vez, recuerdan los intentos que se llevaron a cabo en diciembre 2009, con el gobierno bipartito en María Pita, para proceder a la recalificación de los terrenos de la Fábrica de Armas y promover viviendas.

Fue, aseguran, cuando precisamente Mar Barcón, actual portavoz socialista, era concejala de Urbanismo. Desde la oposición, insisten desde María Pita, el PP se opuso ya frontalmente a recalificar los terrenos de la Fábrica de Armas en su momento, «y es algo que ahora ni nos planteamos llevar a caso».