Los negocios de los Freire más allá de Megasa

La familia, acomodada entre las más acaudaladas de España, posee numerosas sociedades de inversión con las que participa en empresas energéticas, inmobiliarias o logísticas; su mayor 'pelotazo' lo dio en Portugal

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

Acomodados desde hace tiempo en los rankings de las mayores fortunas de España, los hermanos Freire Arteta, a los que Forbes atribuye un patrimonio de 800 millones, son conocidos como los dueños de Megasa y desconocidos por todo lo demás. Discretos y silenciosos como Ortega, como Modesto Rodríguez, incluso en la planta de Narón saben los trabajadores que a los dueños no les gusta que se aireen los asuntos domésticos.

El grupo siderúrgico de Megasa tiene centros, además de en Galicia, en Oporto y Lisboa, con una extensión comercial en Madrid, Freire Productos Siderúrgicos SA. El brazo comercial es Metalúrgica Galaica, que entró en pérdidas en 2013 y se repuso al año siguiente con un resultado positivo de 17,3 millones.

La fortuna familiar creció un 4,8%

La planta de Ferrolterra (Megasa Siderúrgica) llegó a estar bajo amenaza de cierre y sufrió un ERE. La tarifa energética y el sistema de primas la castiga más que a nadie y la empuja hacia las pérdidas. Pese a estas cuitas, el centro sigue por ahora en pie y también los hermanos Freire que, según El Mundo, aumentaron en el último año un 4,8% su considerable fortuna.

Son Enrique, Francisco Javier, Bartolomé y María Petra a quien hacen referencia los ranking. Si bien, la propiedad de Megasa se distribuye en otras dos ramas familiares, los Freire Lago y los Freire Eimil. El imperio metalúrgico tiene como último eslabón la sociedad patrimonial Bipadosa, domiciliada en Madrid, con 155 millones en activos y 6,7 millones de beneficio en 2014.

Por tierra y por mar

El problema está en el camino intermedio, donde intervienen una constelación de sociedades de inversión que tienen intereses en el sector inmobiliario, energético o el logístico y que hacen muy complejo seguir los pasos de los Freire. Una de las empresas en las que participan es el llamado Grupo TT –Transportes Almacenes Transitarios– con Pérez Torres, ilustre inquilino del puerto coruñés de Punta Langosteira, como socio.

La empresa de transporte nació para dar servicio a sus socios, pero fue expandiendo sus operaciones con seis delegaciones en España y otras dos en Portugal, hasta superar en los buenos tiempos, antes de la crisis, los 60 millones de facturación. Ahora está más decaída pero sigue presentando una cifra de negocio de 46,8 millones en datos de 2014, curso en el que obtuvo beneficios de 248.000 euros y atesoraba un patrimonio de algo más de 5 millones.

Para cada hermano la suya

En el consejo está Recanto Inversiones 2006, que es la sociedad de inversión que controla María Petra Freire; Inver Oitavos, de José Enrique Freire; Certaratio SL, de Francisco Javier Freire; y salió recientemente Gestion Miqk, de Fernando José Freire Vázquez. Da una idea de la compejidad del conglomerado familiar, con brazos inversores domiciliados en su práctica totalidad en Madrid.

Todavía hay más, como Mace 1117 Inversiones, de Bartolomé José Freire, sociedad con la que participaba en la inmobiliaria de la familia, Galaica de Promociones Inmobiliarias.

La solución energética

En 2007, los Freire formaron parte a través de Megasa de la creación de Fortia Energía, una especie de central de compras para optimizar el abastecimiento de energía de grandes consumidores. Basta con ver los socios: Cementos Cosmos, Celsa, Cemex, Portland, Alcoa, ArcelorMittal… Enrique Freire es actualmente consejero.

Fortia Energía, con domicilio en Madrid, facturó en el último ejercicio presentado en el Registro Mercantil 546 millones.

Portugal, la tierra del oro

Lejos de Madrid, los Freire también han hecho negocio, con Portugal como espacio de referencia. Allí despliega Bipadosa cuatro fiiales, Atlansider SGPS, domiciliada en Seixal, cerca de Setúbal; SN Maia Siderúrgica Nacional, SN Seixal Siderúrgica Nacional y Siderúrgica Nacional E.P. Longos.

Asociadas estas a centros productivos, en realidad, el gran pelotazo de la familia tuvo que ver más con una venta que con una compra. En el año 2010 se deshicieron del 6,46% que controlaban en el capital de la multinacional portuguesa Cimpor. El comprador fue el grupo brasileño Camargo Correa y el importe superó los 282 millones de euros. José Enrique Freire y Vicente Arias, e ex vicepresidente de Banco Pastor, eran consejeros de la cementera portuguesa que controló Corporación Noroeste, Cementos Cosmos incluída.

Los Freire también fueron de los afectados por la anulación del tax lease por su participación en navieras y tienen una sicav con 10,1 millones de patrimonio, Tietar de Inversiones, aunque como administradores figuran otras ramas de la familia, los Freire Eimil y los Freire Lago.

Avatar

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp