Los Freire planean llevarse casi el 40% de la producción de Megasa en Narón
Plantean a los sindicatos eliminar 200.000 toneladas anuales, lo que dejaría a 47 trabajadores de la plantilla en la calle
Las reuniones que en los últimos dos días han mantenido sindicatos y dirección de Megasa van desgranando con cuentagotas los planes de la familia Freire, una de las más acaudaladas de España según Forbes, para la planta del grupo en Narón, Megasa Siderúrgica. El planteamiento de la empresa aboga por eliminar una producción de 200.000 toneladas anuales en la fábrica, lo que impactará directamente sobre los turnos de acería y laminado y provocará el despido de 47 trabajadores. La plantilla actual está en los 169 empleados.
Sobre las razones de esta reducción, informa el comité de empresa, los Freire aluden a que es producto no rentable, sin aclarar demasiado. De hecho, los sindicatos han solicitado más documentación a la empresa para poder valorar la situación ya que, por el momento, consideran los despidos «injustificados». En todo caso, prescindir de esas 200.000 toneladas equivaldría a suprimir un turno de producción y dejaría tocada a la histórica empresa. Megasa Siderúrgica produjo en el último año 496.000 toneladas, según los datos que transmitió el grupo al comité de empresa. Con el recorte, la producción se rebajaría alrededor del 40%.
La sombra de Portugal
La planta de Narón cerró 2013 con una cifra de negocio de más de 254 millones y un beneficio neto de 506.659 euros. Ambas magnitudes se habían reducido respecto al ejercicio 2012. La fábrica abastece a Metalúrgica Galaica, que es el brazo comercial del grupo, y que entró en pérdidas.
Ese año, la planta de Ferrolterra ya estuvo bajo amenaza de cierre a causa de los precios de la energía, que le restaban competitividad. La opción que se manejó entonces es que la familia Freire se llevase la producción a Portugal, donde despliega otras dos fábricas similares a la naronesa.
Una oportunidad más
La negociación con el comité de empresa, copado integramente por UGT, sigue igual que empezó, atascada. El sindicato no ve argumentos en los datos que aporta dirección para justificar el despido de casi un tercio de la plantilla. A la solicitud de más documentación, los representantes de los trabajadores han sumado un calendario de movilizaciones que se activará en cuánto la compañía active los despidos. Implicarán un parón indefinido en el turno de noche.
Por el momento, el conficto queda en suspenso hasta la próxima reunión, que será el martes día 13. La dirección de Megasa había planteado zanjar el asunto este jueves y dar por cerradas las negociaciones, pero los sindicatos han conseguido un encuentro más al que asistirán con la misma intención de tumbar los despidos.
