La Fiscalía investigará si hubo información privilegiada en Pescanova a petición de la CNMV

Había quien acusaba a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de no ser suficientemente contundente con Pescanova. Sin embargo la presidenta del supervisor bursátil, Elvira Rodríguez, reveló que el pasado jueves remitió a la Fiscalía General del Estado un informe sobre la actividad de los consejeros de la multinacional pesquera. Le pide que dilucide si alguno de ellos incurrió en un delito de uso de información privilegiada o abuso de mercado.

Ya hace más de un mes que la CNMV informó de la apertura de una investigación por este motivo. Sin embargo, ha sido ahora, cuando la figura del presidente de Pescanova, Manuel Fernández de Sousa, está más que nunca en tela de juicio, cuando el Comité Ejecutivo del organismo ha decidido remitir un dossier a la Fiscalía para que lo investigue.

Delito tipificado

Rodríguez, aseguró en un acto en Madrid que de demostrarse que hubo consejeros que usaron información privilegiada, estos habrían incurrido en un delito tipificado en el artículo 285 del Código Penal.

El artículo condena a quien “de forma directa o por persona interpuesta hiciese uso de alguna información relevante para la cotización de cualquier clase de valores o instrumentos negociados en algún mercado organizado, oficial o reconocido, a la que haya tenido acceso reservado con ocasión del ejercicio de su actividad profesional o empresarial, o la suministrase obteniendo para sí o para un tercero un beneficio económico superior a 600.000 euros”.

Pena de prisión

La pena a la que podrían enfrentarse, según el Código Penal, tiene un máximo de cuatro años de prisión, una multa que llegaría al triple del beneficio obtenido o la inhabilitación para el ejercicio de su actividad por un período de entre dos y cinco años.

De todas formas, la CNMV, de momento, ha remitido información a la Fiscalía, pero no se sabe si hay delito o se abrirá una acción administrativa.

Sociedad Gallega de Importación de Carbones

Fernández de Sousa ha llevado a cabo numerosos movimientos accionariales en los meses anteriores a la presentación del concurso de acreedores. Según él mismo confesó ante la CNMV, entre el 4 de diciembre y el 27 de febrero, se deshizo de un total de 1,98 millones de acciones de grupo de congelados, representativos del 6,9% del capital. El importe de la venta sobrepasó los 32 millones de euros.

Además, este lunes se ha conocido que Sociedad Gallega de Importación de Carbones, empresa controlada al 100% por Sousa-Faro, redujo su participación en Pescanova hasta el 0,052% a principios de año. Según consta en la CNMV, la firma vendió tres paquetes de acciones entre el 3 y el 7 de enero.

Expedientes en marcha

De forma paralela, la CNMV continúa trabajando en los expedientes a la firma gallega que se derivan de la falta de comunicación de participaciones de los miembros del consejo de administración y por la no atención de la compañía a los requerimientos del supervisor sobre la presentación de las cuentas de 2012.

Por otro lado, este martes, día 23, finaliza el período oficial como presidente de Fernández de Sousa. Sobre el papel, la reelección debe pasar por la junta de accionista, que convoca el consejo de administración.

El mandato de Sousa

La situación actual de la pesquera no hace preveer la convocatoria de ningún conclave para debatir esta cuestión. Los llamados consejeros díscolos tampoco parecen interesados, “en este momento”, a forzarlo. Todo parece indicar, que Fernández de Sousa continuará en el cargo como presidente en funciones.

Aunque tanto Damm como Luxempart llegaron a pedir en varias ocasiones la revocación de Fernández de Sousa de su cargo, en este momento, prefieren esperar acontecimientos. Sobre todo, una vez la CNMV ha remitido la investigación a la Fiscalía y la pesquera ha decidido entrar en concurso de acreedores.

El juez podría decretar que los administradores concursales designados sustituyan a los gestores de la compañía.