La embotelladora de Coca-Cola y los sindicatos se levantan de la mesa sin acuerdo

La dirección y la plantilla ponen fin a las negociaciones a falta de un acercamiento entre las partes tras la sentencia que anulaba el expediente laboral

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

Ni el ex ministro de Trabajo, Manuel Pimentel, ha conseguido que la embotelladora de Coca-Cola y los sindicatos lleguen a un acuerdo.

El despido de más de un millar de trabajadores y el cierre de cuatro plantas han erosionado demasiado la relación entre la dirección y la plantilla. Ambas partes se han levantado de la mesa, tras meses de negociaciones, sin pacto, según han subrayado tanto UGT como CCOO.

Los representantes de los trabajadores explican que la falta de entendimiento ha sido motivada, principalmente, por la complejidad jurídica del caso –ya que no hay ningún precedente de pacto laboral de este tipo con una sentencia previa– así como por las diferencias en el contenido del acuerdo.

Ejecución provisional de la sentencia

Mientras los sindicatos solicitan que, de momento, se acate la decisión de la Audiencia Nacional y se reincorporen a los despedidos así como que se reabran las factorías cerradas, la empresa sigue sin mover ficha. Por ello, tanto UGT como CCOO esperarán al próximo 4 de noviembre cuando tendrá lugar una vista de la Audiencia Nacional sobre la ejecución provisional de la sentencia.

“No nos queda más remedio que constatar la imposibilidad de un acuerdo, pero nos sentaremos a dialogar las veces que haga falta”, ha subrayado el secretario del sector de Alimentacion y Bebidas de UGT, Sebastián Serena. Y, en la misma línea se pronuncia CCOO. “Sobre el empleo y los contenidos del acuerdo no se ha llegado a ningún acercamiento”, ha añadido el sindicato.

La sentencia que anula el ERE no es todavía firme y habrá que esperar, también, a que se pronuncie el Supremo al respecto. Pero, sea como fuere, las partes implicadas siguen sin entenderse para hallar una solución que ponga fin a este conflicto.

La propuesta, insuficiente para los trabajadores

La embotelladora única de Coca-Cola –Coca-Cola Iberian Partners– proponía ciertos cambios que los trabajadores han considerado insuficientes porque no se consideran la reapertura de ninguna planta.

Además de facilitar traslados, la compañía daba la posibilidad de salidas incentivadas, con prejubiliaciones a los 56 años y bajas con indemnizaciones de 45 días por año. Para los trabajadores mayores de 56 años se mejoraban las condiciones al poder percibir el 80% del salario hasta los 59 años y el 90% hasta los 64. Pero, al final, estos cambios tampoco han sido suficientes y cada una de las partes se ha ido por su lado.

Coca-Cola Iberian Partners está presidida por la multimillonaria catalana Sol Daurella y dirigida por Víctor Rufart.

Avatar

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp