La Cámara de A Coruña, a contracorriente: incrementa un 70% el superávit

Sigue la Cámara de Comercio de A Coruña presentándose como un oasis en el desierto. El pleno presentó en su última sesión las cuentas del ejercicio 2015, que, un año más, cierra en positivo y elevando el superavit respecto al año anterior en más del 70%, hasta los 388.480 euros.

La Cámara coruñesa es de las pocas en España que han conseguido mantener la estabilidad financiera después del fin de las cuotas, que provocó un auténtico terremoto en Galicia y abrió las puertas a las fusiones.

Reducción de gastos

«En este sentido, cabe señalar como indicador a tener en cuenta que, mientras los gastos de personal en otras cámaras alcanzan hasta el 70% del total, en A Coruña constituyen el 41%, situación que se viene manteniendo en los últimos años, tras los ajustes realizados por la entidad en los años más duros de la crisis», explica al respecto la Cámara en un comunicado.

«También los gastos generales se han reducido al mínimo, tras alcanzar una cifra de 215.000 euros, siguiendo una línea decreciente desde el año 2008, en el que este capítulo supuso 530.000 euros», insiste la entidad.

Reservas intactas

La Cámara justifica su solvencia en el crecimiento continuado de los ingresos, que ascendieron a 2’8 millones de euros el año pasado. Y también en que no ha tenido la necesidad de recurrir al fondo de reserva previsto para financiarse en años de déficit, por lo que este Fondo continúa creciendo.

«Si a todo ello le sumamos que no tenemos ni un solo euro de deuda y que contamos con un patrimonio saneado -señala su presidente, Marcelo Castro-Rial Schuler- estamos en disposición de asegurar que la solvencia de esta Cámara, a día de hoy, está garantizada».

La cobertura a las empresas de Ferrol, en el aire

En cuanto a los movimientos que están configurando el nuevo mapa cameral gallego, los responsables de la Cámara coruñesa confirmaron que tanto la Xunta de Galicia como las asociaciones empresariales de la comarca de Ferrol solicitaron a la Cámara de A Coruña que acogiese la actividad que ya no puede desarrollar la entidad ferrolana, en fase de liquidación.

«En respuesta a esa solicitud, -indicó el presidente de la entidad- realizamos un estudio riguroso, en base al cual presentamos nuestra propuesta. Esta propuesta, como no podía ser de otra manera, está condicionada a una serie de garantías solicitadas a la Xunta de Galicia, tanto porque es la que conoce a fondo la situación como por su doble papel en la misma: por una parte, como responsable de la gestora que sustituyó a los órganos corporativos, y por otra, como Administración Tutelante de la propia Cámara de Ferrol».