Jove retrata a las renovables: provisona en España e invierte en América

El empresario Manuel Jove abrió nueva etapa en 2013. La venta de su participación en BBVA, entidad de la que llegó a ser el principal inversor privado, y de la petrolera colombiana Vetra sirvió a Inveravante para limpiar de un plumazo 1.200 millones de deuda que mantenía con la banca y centrarse en nuevos negocios, como el de las bodegas o el energético.

Ese proceso de inversión-desinversión, que se repite cíclicamente en Inveravante, ha generado en 2014 unos beneficios de 51,6 millones para el holding, que disminuyó notablemente sus ingresos en la comparativa del año anterior debida a que la comparativa está desvirtuada por las ventas de 2013.

Apuesta energética

La memoria de la empresa muestra que más de la mitad de la cifra de negocio, casi un 60%, procede del negocio de las renovables. Jove ha invertido en parques eólicos en Brasil y Canadá, y en energía hidráulica en Panamá, con dos nuevos proyectos que se suman al que estaba concluyendo también en el país carioca.

Curiosamente, en España ha provisionado 40 millones por el impacto de la reforma eléctrica en sus negocios eólicos, 5 parques, y de energía solar. Además del desarrollo energético, el empresario que vendió Fadesa a Fernando Martín construirá y explotará en México un intercambiador de transportes en la capital, con una concesión de 41 años, según avanzó el digital Voz Populi.

Auge de las bodegas

La deuda se elevó durante el ejercicio hasta los 750 millones de euros, debido principalmente al desarollo de sus proyectos energéticos lejos de las incertidumbres regulatorias de España.

En cuanto al resto de áreas, las bodegas –-de Jerez, Rioja y Ribera del Duero–dispararon sus ingresos y constituyeron el 10% de los ingresos de Inveravante. Al sector inmobiliario le