El negocio millonario de Blusens con los receptores pirata
La Polícía estima que Blusens facturó 1,6 millones de euros en medio año con las ventas de su decodificador, que daba acceso ilícito a la señales de televisión
La investigación policial iniciada contra Blusens tras las denuncias de una organización de derechos intelectuales y de autor, Egeda, con el respaldo de la Liga de Fútbol Profesional y Mediapro, se ha saldado con un total de seis personas imputadas. La Policía Nacional hace balance y señala que se han incautado, además, 4.600 terminales a través de los ocho registros realizados dentro la operación contra el grupo que lideraba José Ramón García.
En los registros realizados por los agentes policiales se han intervenido, además de las 4.600 terminales, «numeroso material informático, abundante documentación contable y financiera y dinero en efectivo». Según la Policía, Blusens facturó 1,5 millones de euros a través de las ventas de estos aparatos que realizaban a través de 14.000 puntos de venta que permitían el «acceso ilícito a la señal de televisión de multitud de canales, algunos de acceso condicionado a pago».
Toda una red
La Policía señala que la investigación desarrollada ha permitido «comprobar y certificar» que, a través de herramientas de certificación digital que se «comercializaba en grandes superficies y de forma masiva un dispositivo multimedia que permitía visionar de forma gratuita contenidos televisivos y audiovisuales infringiendo derechos de propiedad intelectual». El dispositivo WebTV ha sido retirado de todos los puntos de venta y, aunque el receptor se sigue encendiendo, tiene bloqueado el acceso a internet, por lo que queda inutilizado.
El sumario se instruye en el Juzgado número 3 de Santiago, cuyo titular, Andrés Lago Louro, ordenó las detenciones, primero la de José Ramón García, y ordenó la retirada de la venta de los dispositivos. Fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) confirman que este viernes se decretó el levantamiento del secreto de sumario.
