El comprador de las plantas de Alcoa se quedará sin primas eléctricas
Red Eléctrica impedirá que las factorías de A Coruña y Avilés participen en la subasta de interrumpibilidad de mayo por haber renunciado al servicio
El nuevo comprador de las plantas de Alcoa en A Coruña y Avilés se quedará sin una de sus fuentes de ingresos. El director general de Operaciones de Red Eléctrica, Miguel Duvison, ha confirmado este jueves que estas factorías no podrán presentarse a la próxima subasta de interrumpibilidad que se celebrará en mayo, añadiendo un nuevo obstáculo a la llegada de un nuevo inversor.
La razón está en que estas dos plantas, pese a que sí acudieron a la última subasta de interrumpibilidad (del mes de diciembre), acabaron renunciando a este servicio antes del mes de marzo, lo que les imposibilita participar en la nueva convocatoria de mayo.
Como parte del acuerdo para el expediente de regulación de empleo (ERE) para sus dos factorías, la compañía se comprometía a mantener en funcionamiento sus dos fundiciones a cambio de una “parada ordenada” de las cubas de electrolisis, las más electrointensivas de las factorías de A Coruña y Avilés.
Compensación por “apagones”
De esta forma, el inversor que decida tomar las riendas de las plantas de Alcoa en A Coruña y Avilés se verá privado de una fuente de ingresos complementaria durante sus seis primeros meses de andadura.
La subasta de interrumpibilidad asigna unas determinadas retribuciones a la industria electrointensiva como compensación por las desconexiones de la red a las que se ven obligadas a llevar a cabo en momentos en los que peligra el suministro eléctrico a determinadas zonas por picos de demanda o mínimos de oferta.
La última subasta de interrumpibilidad del mes de diciembre se saldó con unos precios inferiores a los del año anterior y sentaron como un jarro de agua fría entre la industria. La subasta se saldó con la puesta en marcha de 47,7 millones de euros (un 40% menos que en el mismo periodo del año anterior), agravando la crisis de Alcoa, que por aquel entonces ya negociaba el ERE para sus plantas de A Coruña y Avilés.
