El comité de empresa estudia denunciar el ERE de Cementos Cosmos

El comité de empresa de Cementos Cosmos está dispuesto a denunciar el ERE planteado por la dirección de la compañía en la fábrica de Oural (Lugo). Las buenas perspectivas para los trabajadores después de que un empresario sarriano se comprometiera a comprar la totalidad de la producción de la fábrica se han esfumado. Votoramtin, la compañía brasileña que controla la cementera, ha puesto sobre la mesa de negociación un expediente de regulación de empleo, que incluye el despido de 36 personas en la planta gallega y el de otras 30 en la de Toral (León), así como 22 traslados y 12 reducciones de jornada.

El representante de los trabajadores, Francisco López, ha asegurado que estas condiciones “distan mucho” de las pactadas inicialmente con el comité de empresa y que la dirección ha elevado unilateralmente el número de despidos de 28 a 36. Por ello, anunció que tomarán medidas judiciales «que implican a terceros, como denunciar el ERE por ilegal».

Riesgo de cierre

Los trabajadores temen que las condiciones planteadas por Votoramtin sean la antesala del cierre de la planta. Aseguran que 70 de los 75 trabajadores de la empresa en Galicia se verán afectados por el ERE. “Los otros cinco trabajadores que quedan son directivos que pasarían a gobernar las dos fábricas”, explica López.

Pero en el lado de los trabajadores está también la oferta de un empresario sarriano afincado en África para la compra de la totalidad de la producción con el fin de importarla al continente africano. En este sentido, y ante las demandas de la empresa, López advierte que “»el empresario pide que el cemento proceda de la planta de Oural y en caso contrario pueden surgir problemas en la negociación».

Frenazo en la producción

Mientras los trabajadores estudian su próximo movimiento, la dirección sigue ajustando la producción de la fábrica sarriana. Este jueves ha emitido un comunicado anunciando que parará la producción de ‘clinker’, el producto básico con el que se elabora el cemento, hasta 2014.

El frenazo responde, según las explicaciones de Cosmos, a que está cubierta la demanda para lo que resta de año. Las previsiones que maneja la empresa son pesimistas. Aseguran que, conforme a los datos de la patronal Oficemen, el desplome en el consumo de cemento durante enero de 2013 con respecto al mismo período del año anterior se sitúa en el 21,5 por ciento.