Adolfo Domínguez cambia hasta el logotipo de la empresa

Adolfo Domínguez estrena imagen corporativa coincidiendo con el lanzamiento de la nueva colección, la primera tras la fusión de todas sus marcas

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La junta general de accionistas de Adolfo Domínguez, celebrada este jueves, ha resultado ser una caja de sorpresas. Además del anuncio de colaboración entre la firma gallega y la multinacional mexicana Gin Group para continuar con la expansión por América, la compañía textil ha presentado su nueva imagen corporativa, en la que el fundador pierde algo de protagonismo.

El nuevo diseño de la marca, según explican fuentes de la empresa a Economía Digital, representa un nuevo momento del proceso de renovación de la compañía. Las líneas bajo las iniciales del nombre y el apellido son un guiño a la escritura digital, mientras que el nombre comercial se convierte en una palabra única: ‘Adolfodominguez’.

La nueva imagen corporativa estará ya en las prendas de la colección otoño invierno, “un momento importante a nivel producto” ya que será la primera que lance al mercado desde que se produjo la fusión de todas las marcas de la compañía en una sola. Después de la ropa, el siguiente paso será implementarla en los establecimientos, algo que desde Adolfo Domínguez indican que se hará “de forma progresiva”.

Cambios no solo en la marca

El proceso de renovación, iniciado hace ahora justo dos años, ha traído consigo cambios de gran calado, empezando por el paso atrás de Adolfo Domínguez para dejar la dirección general en manos de su hija Adriana, una decisión que tomó después de la salida de Estanislao Carpio –su mano derecha durante muchos años– y tras fracasar la llegada del ex de Inditex Costas Antimissaris.

También ha habido un cambio en la política de comunicación. Adolfo Domínguez ha perdido el miedo a vender sus productos, y campañas como la de los ‘selfies’ protagonizados por Luis Tosar o Inma Cuesta, o la más reciente #yonosoyadolfo, han tenido un enorme seguimiento y una gran acogida en redes sociales.

Los nuevos aires han sentado bien al grupo, que si bien no ha logrado dejar atrás los números rojos, ha conseguido mantener una senda de crecimiento del 4% interanual y una mejora del 50% en su resultado operativo. En el último ejercicio, según certifican las cuentas aprobadas en junta este jueves, la firma gallega alcanzó una facturación de 114 millones de euros tras elevar sus ventas un 12%.

 

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