El pluriempleo silencioso de Antonio Couceiro

Apenas unos meses después de tomar los mandos de Afigal y de ser nombrado consejero en varias empresas, el ex conselleiro y ex director general de Begano asume la presidencia en funciones de la Cámara de Comercio de A Coruña

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Antonio Couceiro, el que fuera conselleiro de Industria, director general de Instituto Galego de Vivenda e Solo, director general de Begano y Presidente de la Autoridad Portuaria de A Coruña sigue sumando cargos a su currículo. El último, el de presidente en funciones de la Cámara de Comercio de A Coruña, tras la salida de Marcelo Castro-Rial.

Este ingeniero de caminos, que inició su actividad en empresas del ramo de la construcción metálica antes de asumir responsabilidades políticas, ostenta en la actualidad responsabilidades en varias empresas e instituciones, que tendrá que compaginar con su nuevo cometido dentro del organismo cameral.

Couceiro, hasta ahora vicepresidente de la Cámara, es también, desde enero del pasado año, presidente del Instituto Tecnológico de Galicia. En 2016, fue designado presidente de la Comisión de Riesgos de Afianzamientos de Galicia (Afigal), la sociedad de garantía recíproca con base en A Coruña, en representación de la consultora Norcorporate, de la que es socio presidente.

También consejero

Al margen de estos cargos de máxima responsabilidad, Couceiro es desde hace años consejero de Inveravante, el holding del empresario Manuel Jove. También lo fue de la Empresa Municipal de Aguas de A Coruña (Emalcsa), hasta noviembre del pasado año. Pero ha sido en el 2016 cuando más empresas han llamado a su puerta para ofrecerle un sillón en su órgano corporativo.

La primera de ellas fue Nueva Pescanova, la sociedad resultante de la reconversión de la multinacional pesquera, ahora en manos de la banca, que lo incorporó a su consejo en abril de este año. La otra fue International Firm Baltar & Associates, la consultora del ex de Abanca Raúl Baltar, que en mayo creó un consejo de administración del que también forma parte Couceiro.

El trabajo se le acumula. De momento, la presidencia de la Cámara la ostentará en funciones hasta que los vocales del organismo, en un pleno que se celebrará antes de que acabe el año, designarán a un presidente, que bien podría ser el propio Couceiro, para dirigir la entidad hasta la convocatoria de nuevas elecciones.

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